Albert Park marca el mundial

El 80% de las veces, el ganador en la primera carrera del año se acaba llevando el mundial. Esta estadística no ha fallado los tres últimos años. Si Alonso quiere el título deberá, por tanto, empezar con victoria en Australia.

Alonso, Raikkonen y Hamilton cumplieron esta tradición en sus respectivos campeonatos. Victoria en el estreno del mundial y posterior triunfo en el campeonato del mundo.

Los números respaldan el buen inicio en el calendario, que sólo incumple esta máxima en cuatro de las últimas 19 temporadas. Por tanto, la carrera que abre la temporada será más importante si cabe para los que aspiran al título, por garantizar un buen inicio y por poner a las matemáticas de su lado.

El GP de Australia es sinónimo de emoción. En la pasada edición sólo acabaron siete monoplazas en una carrera accidentada en la que el safety-car tuvo que salir hasta en tres ocasiones. Hamilton dominó en aquella ocasión después de lograr la primera 'pole' de la temporada. Raikkonen dio muestras de su potencial con un gran inicio en el que adelantó ocho posiciones.

A Alonso no se le da nada mal el circuito de Albert Park. En su primer mundial acabó tercero, en el año de su bicampeonato, en lo más alto del cajón. Con McLaren fue segundo y en su vuelta con Renault rozó el podio al terminar cuarto.